Anécdota de una de varias Parálisis de Sueño que he experimentado:

Yo recuerdo una parálisis del sueño, tuve varias, esta es una..
Estaba en el sillón de la sala, en el sueño, dentro de un lugar del Centro Tijuana, era el Pasaje Rodríguez caminando, se estaba poniendo un poco rojo todo, era una mezcla entre el cómo solía verse y el cómo se ve ahora (casi siempre olor a cigarro y cerveza artesanal, JESÚS, NO), y desperté, miré todo, no pude hacer nada, no podía respirar, miré a mis padres, estaba gritando por más que quisiera: “Sáquenme de aquí, despiértenme”, y no lo logré ante nada, la respiración se cortaba, mis pulmones estaban deteniendo al igual que el palpitar de mi corazón, me sentía frió, sentía que estaba muriendo en ese entonces, trataba de moverme y con todas mis fuerzas pude mover un poco mi cabeza, ni siquiera pude mover los dedos de mía mano izquierda, ni siquiera cerrar los ojos, es entonces cuando recupero todas mis energías y cómo en una película, inhalo y exhalo y trato de averiguar qué acababa de sucederme.

Fue un enigma para después ser un descubrimiento de hace años atrás, es una intensa película de horror, es como estar en una operación en la sala de urgencias, no puedes moverte, pero sientes... sientes absolutamente todo.